Tell Magazine
Lunes, 17 de Abril de 2006
Reportaje – Actualidad
Vyasa Puja, festividad de los devotos de Krishna

Por: Renzo Dinali

La parsimonia pueblerina de Catemu es rota, un par de veces al año, por personajes que parecen sacados de las atestadas calles de Calcuta, India. Al eufórico son de las mridangas (tambores) y campanillas, centenares de religiosos cubiertos de túnicas blancas y naranjas cantan, bailan y recitan una infinidad de veces el mantra que les da el nombre con el que se les conoce popularmente: Hare Krishna. Cada año se juntan a celebrar a sus gurúes espirituales en festividades llamadas Vyasa Puja. En esta ocasión, se recibe al maestro Gurudeva Atulananda, de origen chileno, pero que en su peregrinación religiosa mundial ha iniciado a centenares de devotos Krishna. Durante un fin de semana, comimos el exquisito prasadam (alimento espiritual), escuchamos música en vivo y conocimos la rígida postura filosófica de este credo místico -considerado como una secta peligrosa por la Iglesia Católica- y que año a año suma fieles que, en búsqueda de un destino superior, miran hacia el oriente.

Es difícil definir una religión en pocas palabras, y más aún cuando esta se basa en una compleja historia narrada desde hace miles de años en sánscrito, una lengua muerta. Pero a grandes rasgos podría señalarse que los Hare Krishnas forman parte del hinduismo tradicional vaishnava que practica bhakti yoga (literalmente, re ligarse a Dios mediante la devoción) en adoración del dios Krishna, quien en el hinduismo es conocido como el octavo avatar (encarnación terrestre) del dios Vishnu y considerado su aspecto más elevado (la «Suprema Personalidad de Dios»).

Este credo fue introducido al mundo occidental por el bengalí A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda, quien comenzó a predicar con gran éxito en Nueva York el año 1966. Sus discípulos publicaron sus traducciones del Bhagavad Guita (el capítulo más filosófico del texto épico del hinduísmo Mahabhárata), el Bhâgavatam y muchas otras escrituras hindúes en decenas de idiomas. A la muerte de Prabhupāda, diversas facciones se disputan el sentido original de su legado. Este incluye reglas como la prohibición de consumir alcohol, tabaco, café o cualquier tipo de drogas, vegetarianismo estricto y la imposibilidad de practicar sexo ilícito, esto es, fuera del matrimonio, siendo el ideal sólo el sexo procreativo

De vuelta a la parcela 11 de la Alameda de Catemu, y tras tres horas de cánticos y recitación de los mantras, Gurudeva Atulananda comienza su clase insistiendo que “nadie puede iluminarse solo y que la gran perfección es querer estar con los devotos, con el objetivo de terminar con el Samsara, esto es, la reiteración incesante de reencarnaciones por las que pasa una persona”.

Durante la primera tarde, el Prabhu Govinda Vilas da su charla para los futuros iniciados. “El orgullo no se quita de la noche a la mañana y es una revolución constante mantenerse idealistas pero humildes a la vez”. “Muchas veces nos señalan como fanáticos, pero el fanatismo más grande se encuentra en el materialismo, ya que nos obliga a ir en contra de sentimientos profundos”.

La Sanyass (devota renunciante a formar familia) Mahamrita Devi Dasi es pintora, vive en Perú. “El 12 de octubre pasado, guru Maharaj me dio la misericordia de darme esta orden de renuncia, que más que dejar cosas, significa que uno tiene que extender su entrega a la palabra de Krishna”.

“Lo que más cautiva de la conciencia de Krishna es que una como mujer siente que tiene un espacio importante de respeto. Una se siente tan bien que dan ganas de compartir la idea con otras mujeres, que se pueden desarrollar sin el aspecto de explotación o de objetos sexuales”.

¿Por qué las mujeres se sitúan en las ceremonias separadas de los hombres?
Porque justamente aquí uno encuentra respeto hacia nosotras. De partida, nos llaman madres, lo que tiene una connotación de respeto y lejana a ser objeto de explotación.

Ya, pero las mujeres están atrás en todos los actos
Eso se hace para no ser tan observadas y anular cualquier especulación. Aunque nuestro maestro espiritual siempre nos llama a estar en paralelo a los hombres. No es en ningún caso por discriminación.

¿Qué pasa con los deseos sexuales, es una carga reprimirlos?
Uno no se reprime, sino que se trasmuta esa energía a través del servicio, por lo que no te frustras. Es un proceso de trabajarlo todos los días y minuto a minuto, además, estás realizando un proceso gustoso, y al experimentar un gusto superior tú ya no sientes atracción por las cosas inferiores, así que es fácil.

¿Cómo fue la niñez de ustedes como devotos en comparación con los demás niños que no están en la conciencia de Krishna?
Niño 1: Nos apena la ignorancia de los demás. Me gusta mi vida así.

Niño 2: A veces se burlan de uno, pero hay que entender que no todos tienen la misericordia de entender la palabra de Krishna y sus enseñanzas. Se cierran a las explicaciones que les damos.

Niño 3: Yo ignoro a los que me molestan. Sé que estoy en un camino mucho más profundo que el de ellos y quiero seguir toda mi vida siendo un devoto.

¿Cómo estás tan seguro a tus 12 años?
Porque lo siento en mi corazón

¿Han tenido problemas en los colegios en que van?
Niño 2: A veces hay profesores que se preocupan por nuestra alimentación y hay quienes creen que nuestros papás son irresponsables, pero cuando entienden un poco nuestras ideas, se tranquilizan

A la muerte de Srila Prabhupāda (1977) se produce un cisma en el credo. ¿Cómo ha sido el mundo de la fe tras estas divisiones
Lo que ha existido son desviaciones de la palabra de Su Divina Gracia. Es por eso que nuestros maestros espirituales se alejaron al ver que quizás había entrado el orgullo a ciertos gurúes, iniciando una reforma, siendo más misericordiosos, más abiertos, menos secretos y menos dogmáticos. Nosotros nos agrupamos en Vrinda y los devotos sin reforma pertenecen a Iskcon. Pero en el fin, todos adoramos a Krishna.

Desde la perspectiva de la fe Krishna, estamos viviendo las fases finales de la vida en la tierra.
Estamos viviendo el Kaly Yuga, la era final, una de las eras más negativas en el ciclo de existencias de este mundo como lo conocemos. Hoy podemos ver una degradación masiva de las sociedades, sumidas al ateísmo, a las guerras, etc.

¿Hay salvación fuera de la conciencia de Krishna?
Tratar de amar a Dios es una cuestión de actitud ante todo. Y esto se da en todas las demás religiones. El que hace el bien, el piadoso, no tiene que temer. El que cultiva el alma, sabe que ésta es más que el cuerpo y la vida terrenal. Y esta alma va evolucionando al acercarse a Dios, a Krishna.


Damodara Maharaj

Texto y fotos: Renzo Dinali C.

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